Me gustaría protegerte para que todos los días, lo único que pudiera escuchar fuera el sonido de tu risa, pero sé que no puedo hacerlo. Esto me lastima como no tienes idea, porque no hay nada que no soporte más que el verte infeliz. Es por eso que prometo nunca apartarme de tu lado y estar siempre ahí para ti, en el momento en que me necesites.
No hay comentarios:
Publicar un comentario